You are currently browsing the El Descodificador posts tagged: Tauromaquia y Actividades Auxiliares Ganaderas


Formación profesional torera

Yo de pequeño quería ser torero. Se lo juro. Tenía una plaza de toros de juguete, con tierra pegada en el albero, y un traje de luces con montera y todo. Cosas de mi tío Manolo, seguidor incondicional de Manolete. Lamentablemente tardé muy poco en cortarme la coleta y dedicarme con todas mis fuerzas al balón, terreno en el que hubiese llegado muy lejos si me hubiesen respetado las lesiones. Mi paso por el mundo de la tauromaquia fue breve, unas semanas entre los seis y los siete años, y un tanto frustrante al no poder contar con una dirección espiritual, con un proyecto pedagógico. Fui torero autodidacta y, maldita sea, fracasé: el único pelo que toque fue el del gato, al que traté de dar una estocada con la aguja de hacer punto de mi abuela. Planta y torería no me faltaban…

Captura de pantalla 2015-10-20 a la(s) 19.32.44

La tauromaquia perdió una gran figura por falta de medios, de planificación, de infraestructuras educativas. Por eso en estos momentos solo puedo dar gracias a dios y a Paquirri por la noticia del año: El Gobierno prepara un Real Decreto para incluir, dentro de la Formación Profesional, un nuevo título denominado Tauromaquia y Actividades Auxiliares Ganaderas. Se impartiría en institutos de toda españa, tendría solo 2.000 horas de duración y lo mejor de todo… ¡Para apuntarse no hace falta ni la ESO!

¿En qué consiste el curso? Se estarán preguntando ahora miles de jóvenes con inquietudes, sensibilidad y arte. Pues en lo que dicta el sentido común: aprender “a desempeñar las tareas propias de los matadores de novillos sin picadores aplicando las bases de la pureza en el toreo…. a mantener en perfecto estado de uso el traje de luces, el capote, la montera y estoque” y, por supuesto, “a mover el capote con soltura, realizar verónicas, pases de pecho o chicuelinas y, por supuesto, clavar las banderillas y el estoque al animal para matarlo”. Pero la cosa no termina ahí, que el curso es muy completo: criterios de adiestramiento de sementales para la recogida de semen, recolectar este jugo con las condiciones de higiene y temperatura adecuadas según la especie, realizar la suerte de matar teniendo en cuenta las características del animal, colocar banderillas teniendo en cuenta la correcta ejecución de la suerte y las características del bicho… Todo lo necesario, en resumen, para conseguir el título de FP básica de novillero. Torturador profesional.

Torturemos, sí, pero con conocimiento. En un país como España, líder de la UE en abandono escolar prematuro, este tipo de iniciativas son recibidas como un soplo de aire fresco. Nos hacen volver a creer en la política, en las buenas intenciones de nuestros líderes, en su capacidad para mejorar esta sociedad convulsa y compleja. Porque vivimos en un país grande del que sentirnos orgullosos: no puedo ir con mi hija a un concierto de Lucinda Williams, tiene solo 14 años, pero puedo llevarla a una plaza de toros a ver cómo masacran a un herbívoro. 

Si en mi juventud hubiese existido el curso Tauromaquia y Actividades Auxiliares Ganaderas posiblemente yo no estaría aquí, escribiendo este blog de medio pelo. Seguramente estaría banderilleando novillos en fiestas populares. O de gira con el Bombero Torero y sus enanitos rejoneadores. Gracias, Gobierno de España, por pensar en nuestros jóvenes y en su futuro.

1257767732348_nino-torero10

 

Un motivo para NO ver la televisión

Corto Maltés. Bajo el sol de medianoche.

Autores: Juan Díaz Canales y Rubén Pellejero.

Editorial: Norma.

Captura de pantalla 2015-10-20 a la(s) 11.22.59

Ha resucitado. Corto Maltés, el marinero misterioso que parecía haberse ido con Hugo Pratt el 20 de agosto de 1995, vuelve con una nueva y formidable historia en el Gran Norte. Canadá y Alaska son los escenarios elegidos por esta leyenda de la historieta para desafiar a la muerte y regresar al mundo de la aventura. Juan Díaz Canales (Blacksad) y Rubén Pellejero (Dieter Lumpen) toman el relevo a Pratt, respetando su espíritu de manera rigurosa, tanto en el guión como en el dibujo: el artista italiano de origen sefardí estaría orgulloso del trabajo de los dos españoles, responsables de un cómic continuista, que mantiene la personalidad de Corto, su carácter intrépido y místico, así como el tono de dibujo y color. Canales y Pellejero no se limitan a copiar, crean, y engrandecen la figura del personaje ideado por Pratt con una evolución respetuosa, moderna y creíble. “Respetamos el nombre y la herencia”, dicen.

“Apátrida quizás. Con tanto movimiento de fronteras es cada vez más difícil saber adonde pertenece cada uno. Aunque confieso que no es algo que me importe mucho…”, asegura este marino veneciano que es un ciudadano del mundo, sin bandera y sin patria. “Bajo el sol de medianoche” es una gozada que entusiasmará a todos los seguidores de Corto que, como yo, creíamos que había muerto junto a Pratt. Un libro en el que se suceden las aventuras a un ritmo frenético, y en el que aparecen personajes clásicos, como Rasputín, y otros tan sorprendentes como el mismísimo Jack London. Larga vida al héroe taciturno e irónico con un aro en la oreja izquierda.

1443161617805